viernes, 24 de mayo de 2013

Fiesta...


Y los vasos estaban vacíos
y la botella rota
Y el lecho estaba abierto
y la puerta cerrada
Y todas las estrellas de vidrio
de la felicidad y de la belleza
resplandecían en el polvo
del cuarto mal barrido
Y yo estaba borracho perdido
y yo estaba loco de alegría
y tú borracha encontrada
toda desnuda en mis brazos.

Jacques Prévert


Contra las patrias... Fernando Savater


Hay quien dice que la no violencia, el pacifismo, antimilitarismo, son posturas ineficaces. Se habría de señalar que el criterio de eficacia no es el único que ha de juzgar lo que debe o no hacerse.
Existen opciones que no son siervas de la necesidad y la muerte, sino libres. Encierran mas heroísmo que el de los matasiete que no valen más que para verdugos o victimas. La violencia solo es eficaz para perpetuar o reproducir el orden basado en la coacción o la violencia; y como todo combate armado concluye en desigualdad de las fuerzas, por revolucionaria que pretenda ser, no hace mas que perpetuar la desigualdad.
Aceptar o rechazar los medios violentos de lucha contra o a favor del orden es cuestión de conformismo. Cuando más conformista se es, más se confía en la violencia.

Contra las patrias, Fernando Savater
Aceptar o rechazar los medios violentos de lucha contra o a favor del orden es cuestión de conformismo. Cuando más conformista se es, más se confía en la violencia.
Contra las patrias, Fernando Savater
Desde hace mucho estoy convencido de que el Estado democrático moderno no tiene como misión fabricar homogeneidad social a costa de las diferencias nacionales de los grupos que en él conviven sino defender el marco común de los derechos individuales en que éstas deben y pueden convivir, lo cual produce la verdadera homogeneidad social deseable. Por tanto, cuando ahora se habla de aceptar la plurinacionalidad constitutiva -no sé si también constitucional, ni me importa demasiado- del Estado español, estoy completamente de acuerdo. Pero llevo el plurinacionalismo un poco más lejos, porque no lo concibo sólo entre cada una de las nacionalidades históricas y el Gobierno central, sino dentro de cada una de ellas. Ser plurinacionalista no es sólo querer la pluralidad nacional en España sino también en Euskalherria o en Catalunya. Quienes se contentan con menos y entienden la construcción política nacional como imposición de valores homogéneos en su territorio de pertenencia -aunque reclamen la pluralidad nacional para el Estado- no son plurinacionalistas sino nacionalistas a secas, siéntanse ante todo españoles, vascos o catalanes. A fin de cuentas, los nacionalistas -incluso los más pacíficos- ven a la humanidad formada por regimientos, cada uno con su uniforme y su pendón que no debe confundirse con el de los demás.
Fernando Savater. "Contra las patrias"
Fernando Savater. "Contra las patrias"

Jaime Sabines...

“Espero curarme de ti en unos días. Debo dejar de fumarte, de beberte, de pensarte. Es posible. Siguiendo las prescripciones de la moral en turno. Me receto tiempo, abstinencia, soledad.
¿Te parece bien que te quiera nada más una semana? No es mucho, ni es poco, es bastante. En una semana se puede reunir todas las palabras de amor que se han pronunciado sobre la tierra y se les puede prender fuego. Te voy a calentar con esa hoguera del amor quemado. Y también el silencio. Porque las mejores palabras del amor están entre dos gentes que no se dicen nada.

Hay que quemar también ese otro lenguaje lateral y subversivo del que ama. (Tú sabes cómo te digo que te quiero cuando digo: «qué calor hace», «dame agua», «¿sabes manejar?», «se hizo de noche»… Entre las gentes, a un lado de tus gentes y las mías, te he dicho «ya es tarde», y tú sabías que decía «te quiero»).

Una semana más para reunir todo el amor del tiempo. Para dártelo. Para que hagas con él lo que quieras: guardarlo, acariciarlo, tirarlo a la basura. No sirve, es cierto. Sólo quiero una semana para entender las cosas. Porque esto es muy parecido a estar saliendo de un manicomio para entrar a un panteón”.

Jaime Sabines, poeta mexicano.

Hay que quemar también ese otro lenguaje lateral y subversivo del que ama. (Tú sabes cómo te digo que te quiero cuando digo: «qué calor hace», «dame agua», «¿sabes manejar?», «se hizo de noche»… Entre las gentes, a un lado de tus gentes y las mías, te he dicho «ya es tarde», y tú sabías que decía «te quiero»).
Una semana más para reunir todo el amor del tiempo. Para dártelo. Para que hagas con él lo que quieras: guardarlo, acariciarlo, tirarlo a la basura. No sirve, es cierto. Sólo quiero una semana para entender las cosas. Porque esto es muy parecido a estar saliendo de un manicomio para entrar a un panteón”.
Jaime Sabines, poeta mexicano.

Histeria


En la época de Hipócrates, se creía que el útero era un órgano móvil, que deambula por el cuerpo de la mujer, causando enfermedades a la víctima cuando llega al pecho. A este desplazamiento se le atribuían los trastornos sintomáticos, esto es, la sofocación o las convulsiones.La etimología de la palabra recoge, por tanto, esa idea: la histeria como una enfermedad del útero y, por lo tanto, propia de la mujer, que causa trastorno en el comportamiento psicológico.
A lo largo del siglo XIX y desde hacía cerca de mil años atrás, los médicos trataban a sus enfermas por medio de masajes de clítoris hasta que conseguían alcanzar el orgasmo, momento en que aplacaban su mal. A partir de 1880 los casos se fueron multiplicando convirtiéndose en excesivos.
Durante la década de 1890, época en que hubo una epidemia de histeria,1 los médicos creyeron encontrar el medio efectivo para calmar la enfermedad: el uso de vibradores y consoladores; desde antiguo se conocía el mal suponiendo que todo partía de lo que los griegos llamaron útero ardiente debido a la ansiedad de las mujeres, su estado de irritabilidad, las fantasías sexuales y, sobre todo, una excesiva lubricación vaginal. Lo achacaban al estado de frustración en que se encontraban.
Al ser una enfermedad, las mujeres acudían periódicamente a recibir tratamiento médico, dándose así por aceptada la práctica y encontrando en muchas ocasiones en la consulta lo que no conseguían en su casa.
En la actualidad ha quedado descartada esta postura, considerándose que no existe relación alguna con el útero y que no es una entidad exclusiva de las mujeres.
A lo largo del siglo XIX y desde hacía cerca de mil años atrás, los médicos trataban a sus enfermas por medio de masajes de clítoris hasta que conseguían alcanzar el orgasmo, momento en que aplacaban su mal. A partir de 1880 los casos se fueron multiplicando convirtiéndose en excesivos.Durante la década de 1890, época en que hubo una epidemia de histeria,1 los médicos creyeron encontrar el medio efectivo para calmar la enfermedad: el uso de vibradores y consoladores; desde antiguo se conocía el mal suponiendo que todo partía de lo que los griegos llamaron útero ardiente debido a la ansiedad de las mujeres, su estado de irritabilidad, las fantasías sexuales y, sobre todo, una excesiva lubricación vaginal. Lo achacaban al estado de frustración en que se encontraban.Al ser una enfermedad, las mujeres acudían periódicamente a recibir tratamiento médico, dándose así por aceptada la práctica y encontrando en muchas ocasiones en la consulta lo que no conseguían en su casa.En la actualidad ha quedado descartada esta postura, considerándose que no existe relación alguna con el útero y que no es una entidad exclusiva de las mujeres.

Cosas locas...


A finales de la década de 1960, Stanley Milgram, un psicólogo de la Universidad de Yale, realizó una serie de estremecedores experimentos sobre la obediencia. Demostró así cómo una situación puede imponerse a la conciencia individual de una persona. Sus hallazgos han servido para explicar las grandes atrocidades de nuestra época: el Holocausto, la matanza de My Lai y el genocidio de Ruanda.

Milgram extrajo a los sujetos de su experimento de todos los estratos sociales: abogados, bomberos, obreros… Todos aceptaron cobrar 4,5 dólares por hora a cambio de participar en un estudio sobre aprendizaje y castigo. Un médico con bata blanca les conminó a actuar como «profesores»; debían leer una lista de palabras que un «alumno» debía asociar con otras desde otra habitación en la que no se lo podía ver pero sí escuchar. Si el alumno se equivocaba, el profesor debía castigarlo con una descarga eléctrica, cuya intensidad iría incrementando con cada respuesta incorrecta. El primer nivel estaba catalogado como «descarga leve de 15 voltios». El último, como «peligro, descarga fuerte de 450 voltios». El verdadero experimento consistía, por supuesto, en ver qué nivel de castigo estarían dispuestos a administrar. A los 180 voltios, el alumno (en realidad, un actor) gritaría para decir que no podía soportar más el dolor. A los 300, se negaría a seguir con el experimento. A los 330, sólo habría silencio. Para sorpresa de Milgram, el 65% de los sujetos llegó hasta el final, los 450 voltios, aunque se les dijera que el alumno tenía problemas de corazón.

Muchos parecían muy alterados (sudaban mucho, se mordían los labios), pero instigados por el experimentador de bata blanca continuaron pese a sus escrúpulos morales. El hallazgo de Milgram horrorizó a la comunidad científica de los años sesenta, tanto por sus cuestionables métodos éticos como por sus terribles resultados. Pero su investigación demostró a las claras cómo gente normal puede ser inducida a cometer actos inhumanos simplemente por la presencia de una figura de autoridad. Milgram descubrió también que cuanto mayor fuera la distancia psicológica del sujeto respecto de su víctima, más probable era que siguiera las órdenes hasta un final fatal. Si el profesor sólo leía las preguntas pero no administraba las descargas, el 90% concluía el experimento; pero si tenía que tocar al alumno para castigarlo, sólo el 30% llegaba hasta los 450 voltios.

Otros datos de interés:
1. El experimento de Milgram se ha vuelto a hacer en Australia, Alemania, Jordania y otros países, siempre con resultados similares.
2. Milgram obtuvo niveles idénticos de obediencia en hombres y mujeres.

Algunas frases de gente inteligente...


En tiempos de cambio, quienes estén abiertos al aprendizaje se adueñarán del futuro, mientras que aquellos que creen saberlo todo estarán bien equipados para un mundo que ya no existe.
Eric Hoffer

Los analfabetos del siglo XXI no serán aquellos que no sepan leer y escribir, sino aquellos que no sepan aprender, desaprender y reaprender.
Herbert Gerjuoy

Yo solía pensar que era la persona más extraña en el mundo, pero luego pensé, hay mucha gente así en el mundo, tiene que haber alguien como yo, que se sienta bizarra y dañada de la misma forma en que yo me siento. Me la imagino, e imagino que ella también debe estar por ahí pensando en mí. Bueno, yo espero que si tu estás por ahí y lees esto sepas que, sí, es verdad, yo estoy aquí, soy tan extraña como tú.
Frida Kahlo

No me des tregua, no me perdones nunca.
Hostígame en la sangre,
que cada cosa cruel sea tú que vuelves.
¡No me dejes dormir, no me des paz!
Entonces ganaré mi reino,
naceré lentamente.
No me pierdas como una música fácil,
no seas caricia ni guante;
tálame como un sílex, desespérame.

Julio Cortázar, No me des tregua, no me perdones nunca...



La nobleza, las grandes palabras, que mal le van
a esta ternura sin mejillas que tocar,
a esta lengua sin labios que entender.
Envilece un amor así que rebota en las paredes del cuarto
o se va cayendo a pedazos de palabras, esto.

Es inútil la argucia y la esperanza,
somos la previsión,
los ojos y la boca orientados al viento. ¿Qué me vale
lo que fue, la suave crónica?
Siempre andaré buscándote en el hoy
de esta ciudad, de esta hora.
Si me doy vuelta, oh Lot, eres la sal
donde mi sed se hace pedazos.

Mira de qué sustancias vivo,
pero no me tengas lástima, yéndote así
todavía más.

Julio Cortázar, Hic Et Nunc





El hombre nace libre, responsable y sin excusas.
Jean Paul Sartre



El «desde ahora y para siempre» de la muerte, empozado en vida, encuentra su antesala más palpable en la melancolía. Lo imposible de reponerse o restaurarse, digamos lo irremediable, se exhibe en aquélla como en un simulacro. Muerte en vida, le llaman algunos. Yo prefiero acuñarla como trampa salvadora. Porque nos induce al curso inverso de acción: incómodos ante la terminalidad de lo concluso, nos obliga a vivir bajo la premura de lo transitorio. O para ser más precisos: es la estela de la muerte la que en la melancolía se transforma en espuela para no retenernos en nada. Así hablamos entonces del más posesivo de los desposeimientos. Urjido por su provisionalidad insoslayable, el hombre es el mejor heredero del hombre, con la melancolía como fundamento dinámico de su quehacer...
"Elogio de la melancolía", de Armando Roa Vial





Quien cree como yo, que el intelecto libre es la principal máquina del progreso humano, no puede sino oponerse fundamentalmente al Bolchevismo tanto como a la Iglesia de Roma. Las esperanzas que inspiran al comunismo son, en lo principal, tan admirables como aquellas inculcadas por el Sermón de la Montaña, pero ellas se sostienen fanáticamente y son igual de probables de hacer tanto daño como ellas.
Bertrand Russell - La Práctica y Teoría del Bolchevismo, 1920




No hay imposibilidad lógica en la hipótesis de que el mundo se creó hace cinco minutos, con una población que «recuerda» un pasado completamente irreal. No hay una conexión necesaria lógicamente entre eventos de épocas distintas; por lo tanto, nada de lo que sucede ahora o sucederá en el futuro puede refutar la hipótesis de que el mundo comenzó hace cinco minutos.
Bertrand Russell: El análisis de la mente




La fe ciega puede justificar lo que sea. Si un hombre cree en un dios diferente, o incluso si usa un ritual diferente para adorar al mismo dios, la fe ciega puede decretar que debe morir ya sea en una cruz, empalado, atravesado por la espada de un cruzado, con un disparo en una calle de Beirut, o dinamitado en un bar en Belfast. Los memes de la fe ciega tienen sus propias maneras inmisericordes de propagarse a sí mismos. Esto es cierto en la fe ciega patriótica y política, al igual que en la religiosa.
Richard Dawkins




"La religión es un insulto para la dignidad humana. Con o sin ella, habría buena gente haciendo cosas buenas, y gente malvada haciendo cosas malas, pero para que la buena gente haga cosas malas hace falta religión." [Steven Weinberg, físico, premio Nobel"




"El camino del hombre recto esta por todos lados rodeado por las injusticias de los egoistas y la tiranía de los hombres malos. Bendito sea aquel pastor que en nombre de la caridad y de la buena voluntad saque a los debiles del valle de la oscuridad por que es el autentico guardian de su hermano y el descubridor de los niños perdidos. Y os aseguro que vendré a castigar con gran venganza y furiosa cólera a aquellos que pretendan envenenar y destruir a mis hermanos, y tu sabrás que mi nombre es Yahvé cuando caiga mi venganza sobre ti" Ezequiel 25:17 (Pulp Fiction)




Todos tenemos miedo a ser maricas. Estoy harto de eso. Quizás debiéramos volvernos todos maricas y tranquilizarnos. No agarrar el cinturón como Jack (Jack Kerouac). Pero Jack, es bueno, para variar. Hay demasiada gente con miedo a hablar contra los maricas, intelectualmente. Lo mismo que hay demasiada gente que tiene miedo a hablar contra la izquierda, intelectualmente. No me preocupa el rumbo que tome el asunto, solo sé que hay demasiada gente con miedo.
Charles Bukowski


Quien no conoce nada, no ama nada. Quien no puede hacer nada, no comprende nada. Quien nada comprende, nada vale. Pero quien comprende también ama, observa, ve... Cuanto mayor es el conocimiento inherente a una cosa, más grande es el amor... Quien cree que todas las frutas maduran al mismo tiempo que las frutillas nada sabe acerca de las uvas.
Paracelso



Según Ortega y Gasset, los elementos principales de la estructura psicológica del hombre-masa serían los siguientes: Una impresión nativa y radical de que la vida es fácil, sin limitaciones trágicas. Por tanto cada individuo medio encuentra en sí una sensación de dominio y triunfo que, le invita a afirmarse a sí mismo tal cual es, a dar por bueno y completo su haber moral e intelectual, lo que le lleva a cerrarse, a no escuchar y por tanto intervendrá en todo imponiendo su vulgar opinión sin contemplaciones, según un régimen de “acción directa”. La característica principal del hombre-masa consiste en que sintiéndose vulgar, proclama el derecho a la vulgaridad y se niega a reconocer instancias superiores a él.
Delante de una sola persona podemos saber si es masa o no. Masa es todo aquel que no se valora a sí mismo- en bien o en mal- por razones especiales, sino que se siente “como todo el mundo”, y, sin embargo, no se angustia, se siente a salvo al saberse idéntico a los demás.



Según Ortega y Gasset, El hombre-masa tiene varios rasgos: libre expansión de sus deseos vitales y una radical ingratitud hacia cuanto ha hecho posible la facilidad de su existencia. Es decir, sólo le preocupa su bienestar y al mismo tiempo es insolidario con las causas de ese bienestar. Uno y otro rasgo componen la psicología del niño mimado. El hombre-masa es el niño mimado de la historia.
El hombre-masa es incapaz de otro esfuerzo que el estrictamente impuesto como reacción a una necesidad externa. El centro del régimen vital del hombre-masa consiste en la aspiración a vivir sin supeditarse a moral alguna.




Las palabras no han fracasado ni fracasarán nunca. Han fracasado y fracasarán los que ignoran su alcance, su significación y su estrategia.
Las palabras son la vanguardia imprescindible de toda acción y de toda transformación que tienda a romper moldes envejecidos y trastos inservibles para la vida de hoy. Toda acción de alcances colectivos, que va a transformar de raíz almas, hombres y estructuras, busca el contagio y la polarización de voluntades, y primero es la palabra o nunca será nada.

José Dávalos. - Oratoria.




-Así es como te enseñan en la escuela - dijo él sonriendo. -Pero así no es como enseña la vida, y diría que la vida es la mejor maestra.
La mayoría del tiempo la vida no te habla. Sólo te golpea. Cada golpe es la vida diciéndote ¡Hey, despierta! hay algo que quiero que aprendas.
La vida nos golpea a todos. Algunos se rinden. Otros luchan. Unos pocos aprenden la lección y avanzan. Aceptan gustosamente los golpes de la vida. Estos pocos necesitan y quieren aprender algo, aprenden y siguen. La mayoría abandonan, pero unos pocos como tú, luchan.

Padre rico, padre pobre. - Robert Kiyosaki.


"Vacía tu mente, se amorfo, moldeable, como el agua. Si pones agua en una taza, se convierte en la taza, si pones agua en una botella se convierte en la botella, si la pones en una tetera se convierte en la tetera. El agua puede fluir o puede aplastar. Sé como el agua. Amigo mío, el agua que corre nunca se estanca, así es que hay que seguir fluyendo”.
Bruce Lee.


Enseñarás a volar...pero no volarán tu vuelo.
Enseñarás a soñar...pero no soñarán tus sueños.
Enseñarás a vivir...pero no vivirán tu vida.
Enseñarás a cantar...pero no cantarán tu canción.
Enseñarás a pensar...pero no pensarán como tú.
Pero sabrás que cada vez que ellos vuelen, sueñen,vivan, canten y piensen...
¡Estará en ellos la semilla del camino enseñado y aprendido!

Madre Teresa de Calcuta




- ¿Y hasta cuándo cree usted que podemos seguir en este ir y venir del carajo? – le preguntó.
Florentino Ariza tenía la respuesta preparada desde hacía cincuenta y tres años, siete meses y once días con sus noches.
- Toda la vida – dijo.

Gabriel García Márquez. El amor en los tiempos del colera.